jueves, 6 de junio de 2013

PLANTARSE: UN MUNDO ESPERA TU ÁRBOL



Plantarse es una Organización No Gubernamental constituida con el firme propósito de despertar conciencia a partir de una acción sencilla y colectiva, pero con un fuerte impacto en lo simbólico en  lo que respecta al abordaje de la problemática que los movilizó: el plantado de árboles. Reducir la huella de carbono, producto del consumo desmesurado y su inefable consecuencia, el calentamiento global. Las jornadas de plantado tienen una fuerte carga de emociones que se adjetivan en acción y en la búsqueda por despertar conciencia en los eventuales jardineros; se los forma para la tarea a realizar y se los informa acerca de la importancia de cuidar todos los recursos a los que acceden, adecuando este tándem de contenidos útiles para la vida de un individuo, en  relación con su comunidad y también desde su ámbito laboral.



Plantarse va tras la búsqueda de nuevos objetivos, diversificar el campo de acción y prolongarlo en el tiempo, transformar una realidad cortoplacista por un programa que favorezca un desarrollo sustentable. Mariano Padró, fundador de esta organización, nos cuenta y acerca a su realidad y sus compañeros de ruta.



Un futuro prometedor para una organización que ha decidido evolucionar ecológicamente y que invita a todos a sumarse desde sus lugares, a plantarnos ante la adversidad y el devenir de la sociedad pre/pos industrial, globalizada y en crisis.






LA SEMILLA DE PLANTARSE. GERMINANDO UNA IDEA.


El principio fue una mezcla de cosas. Por un lado, querer pasar a la acción, digamos, querer hacer algo puntual, juntarse con otra gente y pasar de la charla de hogar o de café a una transformación real, aunque sea chiquita o insignificante, como plantar un árbol. Por otro lado, yo venía  colaborando con una asociación civil que trabajaba en pensamiento estratégico, pero necesitaba algo que pudiera bajarse a tierra. Además, considerábamos que había una falta de espacios verdes, no parques o reservas, sino lugares donde poder meterte a caminar libremente y disfrutar del ecosistema nativo. No existe eso. Yo soy de Luján y cuando hago eso tengo que saltar un alambrado, ir al margen de un arroyo para ver unas mariposas y un par de plantas silvestres. Entendemos que esto debiera existir sin necesidad de una reserva. Por eso surgió la idea de Plantarse, porque no armamos pequeños bosques donde uno pueda ir a disfrutar y pasar el día sin necesidad de una reserva, ni un parque; queremos que simplemente que sea un lugar libre. Que sea un gran baldío. El baldío en sí suele tener una connotación negativa, pero porque no se está contemplando que ahí hay un refugio de biodiversidad.

Nosotros queríamos recuperar eso de forma ordenada plantando árboles nativos. Sumando a esta necesidad la problemática de la huella de carbono, la idea cerraba por todos lados, se complementaban naturalmente.
 


EL BROTE (LA CONSTITUCIÓN DE LA ORGANIZACIÓN).

Empezamos hace tres años con esto, sin papeles, sin poder recibir ayuda económica, y luego formalizamos como organización. La idea fue mutando mucho porque al principio era como más punk, salir y plantar al costado de la ruta, más a la deriva. Después fuimos transformándonos hacia algo más organizado, asesorándonos acerca de qué plantar, entendiendo que cada movimiento que realizás tiene no sólo un impacto, también hay costos que afrontar. Hoy Plantarse tiene más de 400 árboles plantados y si eso lo hubiésemos continuado desde la vía punk, no se hubiese logrado.

PLANTARSE.ORG - PLANTANDO CONCIENCIA

La primera acción que hicimos fue una plantada en Mercedes (Provincia de Bueno Aires). Había una reserva muy linda que estaba un poco descuidada e hicimos una plantada de 100 árboles como para entrar en la agenda del municipio, haciendo que ese espacio pase a ser una reserva propiamente dicha. Uno de los objetivos planteados fue que la gente y otras fundaciones (posteriormente) comprendieran la importancia de preservar un espacio de esas características y que además contribuyeran a su crecimiento.

La respuesta que recibimos fue mejor de la que esperábamos, fue mucha gente a colaborar. Así fue que tanto los vecinos de la zona como otras organizaciones también comenzaron a realizar actividades de plantado. Dimos el puntapié inicial en pos, no sólo de la preservación sino también de la toma de conciencia.

Entre otras experiencias de plantado que surgieron posteriormente se pueden mencionar la del Club de Fútbol de Luján; otra en Tucumán; en Tigre; en Gral. Rodríguez. En línea general, podemos destacar que en las plantadas se genera un muy buen clima donde todos colaboran, porque los aspectos de logística a cubrir demandan eso: hay que cargar palas, los baldes para riego; el trabajo con la tierra y el esfuerzo que implica toda la actividad despierta un espíritu de participación muy interesante. La gente queda muy conforme y los que fuimos como cabeza de actividad quedamos muy motivados y con ganas de hacer otras nuevas.




PLANTAR UN ÁRBOL… PROLONGAR LA VIDA.

¿Por qué un árbol? Lo entendimos como un emblema;podrían haber sido flores, pero encontramos una fuerte identificación con los árboles por el impacto que causa en el tiempo, porque a decir verdad, poner una planta implica el mismo esfuerzo, pero en el largo plazo el árbol suele perdurar y así también prolongar el mensaje. Pero fundamentalmente, por el rol que cumplen en el proceso de captación de emisiones de carbono en la lucha por la reducción esta huella. Para quienes desconocen qué es la “Huella de carbono”, se denomina así al impacto que tienen nuestras actividades en el grado de emisión de Co2 hacia la atmósfera. La emisión se produce cuando se consumen recursos y energías no renovables provenientes del petróleo, carbón y gas. El petróleo y el carbón son los más utilizados y en nuestra vida están insertos, entre otras formas, como plástico y energía eléctrica. El plástico, en relación con el petróleo y la energía eléctrica, con el carbón.

Esto nos habla de que cuando utilizás tu auto para hacer un mandado, tomás un transporte público, un vuelo o consumís un producto que atravesó miles de kilómetros para llegar a tus manos estás contribuyendo a incrementar la huella de carbono. La misma es una consecuencia -entre otras- de este mundo “desarrollado” que, con la impronta del consumo como consigna de buen vivir, trae implícitas grandes cantidades de emisiones. En Argentina la emisión promedio de Co2 por persona durante un año es de cinco toneladas; en Estados Unidos, 22; en países de Europa oscila entre 8 y 11.

Obviamente, no es lo mismo la huella de una persona que vive en una zona rural con pocos recursos que la de una que vive en Buenos Aires. ¿Por qué importa? Porque su consecuencia es el calentamiento global. Éste se da cuando los gases de efecto invernadero se encuentran en la atmósfera en una proporción mayor a la natural, haciendo que la temperatura media del compense  todo el volumen que el mundo utiliza.




ECHAR RAÍCES, LA PROPUESTA.

Lo que propone Plantarse es una política de amortiguación del impacto, pero por sobre todo, de concientización. No es una compensación libre, es decir, yo uso 300 litros de nafta y planto dos árboles, entonces equilibro el universo. No es así, sería imposible pensarlo así y que todo el mundo consuma de esa forma, pero sí es posible que la gente comience a comprender el impacto de los 600 litros que consumió y el trabajo que lleva plantar un árbol, que sólo va a compensar 200 litros. Esto es útil para que se dimensione y se recapacite acerca del uso desmesurado de recursos.

La primer política es cómo reducir lo que consumís: si tenés que hacer un mandado, agarrá la bici; si tenés que ir a lo de un amigo, caminá o tomá un transporte público; si tenés vacaciones tomá un  destino cercano porque irte a China tiene un costo muy alto para el planeta. Hay muchas empresas que han empezado a medir su huella de carbono, también hay otras que definieron incorporar en su agenda acciones para la compensación y reducción. En muchos casos son acciones simbólicas, lo digo en el sentido de que lo están haciendo principalmente para generar concientización interna.

Convengamosque hay algunas que para poder compensar necesitarían plantar 10.000 árboles, entonces simbólicamente se plantan 100. No para fines publicitarios, sino como una acción de concientización puertas adentro; en eso son muy serios porque lo toman como capacitación continua en pos del cuidado de los recursos. Como beneficio adicional, luego cada persona involucrada adquiere conocimientos que también pueden trasladarse al ámbito personal. Por supuesto que esto a largo plazo reditúa en un beneficio económico también. Después nosotros proveemos material para la comunicación interna y una pequeña reseña de la actividad realizada.
Con las empresas que estamos trabajando ya estamos haciendo ejercicios de compensación en función de la energía que utilizan en las oficinas y plantamos dos árboles por cada tonelada emitida, explicando cómo es el proceso y dando consejos para reducir su consumo energético.

La idea es hacer de la actividad una capacitación más que un trabajo de voluntariado. El tema del cuidado posterior de los árboles no lo hace la empresa, tampoco nuestra organización, sino que se da a partir de acuerdos que se cierran con los municipios de cada lugar donde plantamos. El árbol no queda a la deriva. Planificamos en forma permanente seguir creciendo en el desarrollo de jornadas, seguir conociendo municipios y gente, haciendo participar a la comunidad lo más posible.
Nuestra idea para el año que viene es motivar a otros grupos a que se animen a plantar con nosotros. Motivados por nuestra buena experiencia en las jornadas y por todo el conocimiento que fuimos adquiriendo en estos años de trabajo, queremos poder transmitir a otras organizaciones formales o informales, asistirlos y que queden en condiciones de luego organizar acciones de plantado en sus municipios. También tenemos planificado, en la zona oeste del gran Buenos Aires, un trabajo con escuelas de la mano de una empresa local. El plan será ir a un colegio y entregar un kit por alumno para que cada chico pueda tener su árbol, llevarlo a la casa para cuidarlo y a fin de año hacer una jornada de plantado en la zona.


A PLANTARSE

Queremos sembrar el germen de la inquietud y de las ganas hacer, por eso elegimos algo tan territorial y tan práctico, porque decidimos salir a plantar especies autóctonas y ahí fuimos. Invitamos a los demás a que hagan lo mismo. El cambio de paradigma es empezar a transformar
desde uno, hay que generar y motivar los cambios, porque seguro vas a encontrar aliados en tu grupo de amigos o familiares. En cuanto al eje de la organización y su núcleo duro, el grupo humano que forma Plantarse en el aspecto profesional individual es absolutamente heterogéneo
en relación al eje temático; ninguno viene de una carrera ambiental y eso nos da una impronta diferente y es lo que nos gustaría decir. Porque cada uno de nosotros decidimos tomar una iniciativa y salir a hacer, y así logramos plantar 700 árboles (entre árboles y kits). Entonces me parece que eso es lo que nos gustaría contar a los demás, decirles a todos que cualquiera desde su casa o ámbito en el que se desenvuelva puede activar y hacer algo por su cuenta, aunque no tengas un gran respaldo, aunque no te financien. Las ganas de hacer son suficientes.

UN PRODUCTO PEDAGÓGICO Y SUSTENTABLE EL KIT DE PLANTADO

Desarrollamos un producto novedoso y didáctico. Desarrollamos un kit de plantado al que vemos como un
producto lúdico, pensado para las personas que no han tenido ningún acercamiento a una germinación, al plantado de un árbol, o que no están muy interesadas en el tema en general y despertarles algo por esta temática. Una primera aproximación. El kit viene con semillas de jacarandá, la tierra necesaria y adecuada para plantar, una maceta, una pala, un germinador y las instrucciones. La idea es que a través del kit puedas plantar y hacer crecer tu árbol y después nos envíes las fotos de cómo va el crecimiento. Lo importante es que lo hagas y lo adoptes, después podés decidir si lo querés tener en tu casa o salir a plantarlo. La idea es lograr que la gente dé el primer paso y rompa esa barrera que lo separa del involucramiento con otros aspectos de la naturaleza .La respuesta es muy buena, la gente se engancha a hacerlo, nos escriben y nos cuentan y algunos nos envían fotos. El kit se consigue en plantarse.org y ahí se coordina el envío.

EL PRIMER RECONOMIENTO

Plantarse, junto a la fundación FCI, presentó un proyecto de fitorremediación en el río Luján y nos acaban de informar que salimos segundos del primer puesto. Es decir que no sólo si el primero no se presenta somos los ganadores del concurso, sino que también nuestro proyecto es el segundo más importante. Nuestra propuesta es que en una longitud de 1000 metros de las márgenes del río Luján se implemente la fitorremediación. Es decir, a través del plantado de diversas especies que tienen tolerancia a los metales pesados y los extraen del barro se puede sanear el agua. Esas especies luego se cortan y se hace una quema controlada o se entierra, después se hace un nuevo plantado. A partir de un monitoreo este proceso se repite cuantas veces sea necesario. Es una de las pocas formas de sacar los metales pesados sin volver a contaminar, porque hoy se draga el río, pero ese barro contaminado se deposita en otro lado y vuelve a contaminar. El proyecto requiere
de un año de trabajo, involucra al municipio y a las organizaciones sociales y a la comunidad en general, haciendo que todos participen de la capacitación ypuesta en marcha del plan.

SUMATE!

Pueden donar un árbol online para la campaña que se está desarrollando en la provincia de Córdoba. También postularse
para participar como voluntarios para las jornadas de plantado u otras tareas. Pero lo que más nos interesa es que se animen a presentar nuestra propuesta en sus ámbitos de desarrollo, escuela, trabajo, universidad, barrio, etc., para compensar las emisiones. Anímense a transformar!

Web Plantarse - www.plantarse.org
E-mail - contacto@plantarse.org

Leé todo el Especial EcoRevolución acá:



 

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